No miró hacia atrás. ¡Y nosotros, tan fuertes, tan pensantes, tan declamadores de frases maravillosas... No nos atrevemos a traspasar la puerta que está siempre abierta, que nadie cierra...Vos ahí. Yo aquí.
Y a la hora de olvidarte procure dejar intacto el paso de los años que nunca podre tener.
Por todo lo que hoy no queda, voy buscando la manera de quererme un poco más.
Me equivoque, solo quería ser yo misma otra vez.